Pregunta el discípulo: "¿Puede acaso un hombre ser valiente aún cuando siente un profundo miedo en su interior?"
Responde el Maestro: "Por supuesto, de hecho, es el único momento en el cual puede ser valiente"
Esta conversación que leí en algún lado me puso a pensar mucho. A veces pensamos que no podemos ser valientes porque sentimos miedo, y el miedo no es más que la oportunidad misma de convertirnos en valientes. Ahora pienso lo siguiente: "Sin miedo no hay valentía". Así que le di gracias a Dios por el miedo que a veces siento.
Luego me puse a pensar en algo más profundo todavía, y entonces imaginé la misma conversación entre Dios y un hombre:
Hombre: "Dios, ¿puede un hombre tener fe en ti, aún cuando no te vea, no te escuche, y no tenga ninguna prueba de que realmente existas?"
Dios contesta: "Por supuesto, de hecho, es el único momento en el que puedes tener fe."
Alguien llamado Tomás dijo un día: "Si no viere en sus manos la señal de los clavos, y metiere mi dedo en el lugar de los clavos, y metiere mi mano en su costado, no creeré (que Jesús ha resucitado)", los paréntesis son míos.
Una semana después Jesús le mostró sus manos marcadas por los clavos, y le permitió meter su mano en su costado, entonces Tomás creyó. Pero Jesús dijo: "Porque me has visto, Tomás, creíste; bienaventurados los que no vieron, y creyeron"
Desde que entendí estas cosas… le he dado gracias a Dios por esos momentos en los que me siento solo, en los que no veo a Dios por ningún lado, en los que no puedo escucharlo ni entenderlo. Cuando me siento así, sé que es el verdadero momento de la fe, es la oportunidad de creer a pesar de todo.
Sientes que Dios no está contigo, sientes que te ha abandonado, sientes que no hay salida por ningún lado: Es el único momento, en el que puedes tener fe"
La Biblia dice: "¿Quién es el que vence al mundo, sino el que cree que Jesús es el Hijo de Dios?"
Es tiempo de ser Valientes y tener Fe.
Que tengas la compañía del Espíritu Santo en todo lo que hagas.